El Café de Filipinas

Nuestra estancia en Filipinas fue breve y no fue fácil hacerse una visión general de este archipiélago de 7000 islas y de su paisaje cafetero.
Afortunadamente, tuvimos una excelente presentación durante nuestra reunión con Pacita Juan, Presidente del Philippine Coffee Board (PCBI) y del capítulo filipino de la International Women Coffee Alliance.
El Coffee Board se fundó en 2002 para "desarrollar y promover la industria del café a través de programas de asistencia técnica y crédito para fincas de café, y a través de la comercialización y promoción del café para los mercados nacionales y de exportación".
Concretamente, reúne a los aficionados del sector: productores, cooperativas, beneficios, exportadores, tostadores, minoristas... toda la cadena de café, para asegurar el crecimiento sostenible del sector.
Para abordar los grandes retos de la industria en Filipinas, proponemos mirar algunos elementos de contexto.
ESTRUCTURA DEL SECTOR DE PRODUCCIÓN
La mayoría de los productores de café son pequeños. Hay muy pocos latifundios de café y son solo de robusta, ubicados en la isla sur de Mindanao.
Es muy difícil encontrar propiedades tan grandes en la Cordillera porque son tierras ancestrales de pueblos indígenas. Allá el café (arábica) crece a 1.500 m.s.n.m en laderas montañosas, lo que hace imposible la mecanización de la producción.
Así que el café arábica crece allí en el norte de Luzón. La mayor parte se produce de forma orgánica y bajo bosque de pinos (aunque no exclusivamente). En esta área, el café es vecino de inmensas terrazas de arroz que representan una fuente importante de alimentos e ingresos para la población.
El modelo de terraza se ha replicado para facilitar la cosecha de café en en algunos casos como él de la finca orgánica Ola Organic Arabica Farm en Sagada.
DESAFIOS
Productividad
"Es cada vez más difícil convencer a los productores de sembrar café".
El nivel de productividad es bajo, demasiado bajo para cubrir la demanda interna y externa.
"Consumimos alrededor de 180,000 toneladas métricas cuando apenas producimos 30,000" dice Pacita
Por supuesto, la estrategia es aumentar la producción pero los árboles están envejeciendo. Es muy común encontrar árboles de más de 80 años en Sagada y Baggio. Necesitamos una regeneración. Pero eso representará un coste significativo ya que habrá que compensar la pérdida de los productores hasta el momento que los nuevos árboles se vuelvan productivos (2 a 4 años).
No hay un programa de replantación integral pero el gobierno está invirtiendo en distribución de semillas. "Hay planes de utilizar las tierras públicas y las reservas forestales para que el café crezca en el bosque", explica Pacita.
Otro problema proviene de los países vecinos. Vietnam e Indonesia pueden efectivamente producir café muy barato y exportarlo a Filipinas libre de impuestos gracias al acuerdo de la ASEAN. Así que en este contexto de alta competencia, es cada ves más difícil convencer a los productores de plantar café.
¿Que soluciones puede aportar el Coffee Board?
LA ALTERNATIVA DEL CAFÉ DE ESPECIALIDAD: CALIDAD & TRAZABILIDAD
Al principio de la cadena
"Nuestra prioridad es la calidad".
Si solo 3000 toneladas o el 10% de nuestra industria se convierte en café especial, el valor para el productor sería mucho más que si tuviera que plantar el doble de café. Por eso el Coffee Board ha implementado varios programas para capacitar a los productores y brindarles asistencia técnica para mejorar la calidad y la productividad.
"Lo que hacemos es enseñar a los productores lo qué es el café especial", explica Pacita.
Por lo tanto, el Coffee Board se ha esforzado a dar valor a la trazabilidad, buscando y nombrando la fuente del café, desde la aldea al productor. Esto se combina con capacitación para mejorar el procesamiento de café.
Pacita nos recuerda que la mayoría del café producido en el país es robusta (75%). El resto es arábica (17%), excelsa (7%) y liberica (3%). Tres especies diferentes de café. Este escenario todavía es bastante único y se puede convertir en un valor agregado para el país (cf. articulo anterior Filipinas... Un país con cafés muy especiales).
Sin embargo, el problema es que, como liberica, excelsa y robusta pueden crecer en la misma elevación, los agricultores los estaban juntando. No hicieron ninguna disociación para venderlo como un producto distintivo con su propio perfil e identidad.
"Así que lo que hicimos fue decirles que separaran el liberica, que separen el excelsa y que así pagaríamos más por ellos".
Teniendo en cuenta la importancia del robusta en la producción del país, también se manifiesta una clara voluntad de convertir a las Islas Filipinas como el principal proveedor mundial de cafés robusta de alta calidad (Fine Robusta).
Después de la trazabilidad viene el tema del proceso. Los productores han aprendido diferentes formas de procesar el café (natural, honey y lavado), todos los cuales dan como resultado el mismo café con diferentes perfiles y sabores.

Si bien aún se debe mejorar el proceso de cosecha y poscosecha para alcanzar una mejor calidad, el Coffee Board ha hecho grandes esfuerzos, junto con organizaciones como la Fundación Paz y Equidad, para implementar mejores prácticas agrícolas.
Esto hizo subir los precios y generó el entusiasmo de los tostadores de café para estos tipos de procesos únicos. Con esa línea de acciones, el café no se convierte en una mercancía dependiente de la bolsa.
También hay más y más asignaciones del gobierno. A pesar del muy bajo nivel de producción actual (el volumen y el rendimiento han sufrido una disminución del 3,51% entre 2006 y 2015), el gobierno creé en su potencial para generar valor a largo plazo. En consecuencia, la Hoja de ruta de la industria del café de Filipinas se ha lanzado recientemente con la siguiente misión:
Desarrollo de una cadena de valor diversificada de productos a base de café, hecha de acuerdo con prácticas sostenibles y rentables, orientada a la calidad, confiable y basada en la seguridad del suministro y de los consumidores, respectando los requisitos de seguridad alimentaria y ambiental.
El primer capítulo de la estrategia y líneas de acción estan establecido hasta 2022.
Al final de la cadena: evolución del mercado interior.
"Como consumidores se les ha enseñado a pagar más para el café".
Respecto al consumo, el Coffee Board también ha alentado a los profesionales a buscar una mejor calidad para desarrollar la industria del café de especialidad.
Así que, tostadores y barista son ahora más exigentes. Buscan un trato directo y están dispuestos a pagar un precio más alto para diferenciarse.
"Creo que la industria ha logrado impartir a los agricultores que si cuidan su café durante la cosecha, podrían duplicar o incluso triplicar el precio", explica Pacita.
El cambio hacia la calidad también está influenciado por un factor cultural. El café es realmente parte del día a día en Filipinas aunque la gran mayoría de la población todavía consume café instantáneo. Sin embargo, tiende a cambiar a medida que los filipinos descubren nuevas formas de consumir café en el extranjero.
Cabe señalar que el 10% de la población vive en el extranjero (10.2 millones de filipinos) principalmente para alcanzar mejores oportunidades de carrera y condiciones de vida. Al vivir afuera, están expuestos a espresso, cappuccino, latte... Como consumidores, también se les ha enseñado a pagar más para el café. Cuando vuelven, su gusto por el café es diferente.
Así que es cuestión de un poco más de tiempo y pasarán del café instantáneo al café tostado y molido.
"Lo que en realidad es de donde empezamos! En la época de la ocupación española, lo que estábamos bebiendo era café molido. Fueron los americanos los que trajeron café instantáneo." concluye Pacita