Salvar el café de Kwembago

En el camino de Dar es Salaam a Lushoto, mientras entramos en las montañas, empezamos a ver la forma de unos plataneros.
Lo que aprendí durante mis viajes anteriores en origen es que debajo de los plátaneros, muchas vezes se encuentra café.
Sin embargo no esperaba encontrar ninguno cuando llegué a la pequeña ciudad de Lushoto.

Este pueblo se encuentra en la parte occidental de las montañas se Usambara que se formaron hace más de dos mil millones de años y alberga una selva tropical.
Ocupada por tribus indígenas hasta 1862, cuando los colonos alemanes se movieron allí trayendo con ellos cultivos comerciales como pinos, plátanos, té, café y maíz, la región cayó bajo el gobierno británico después de la primera guerra mundial, mientras que Tanzania se convirtió en parte de la colonia británica de Tanganyika.
La ocupación pacífica generó un cambio importante en la relación entre el hombre y la naturaleza, la explotación del bosque y la transición de la agricultura tradicional a una agricultura más productiva.
Las montañas de Usambara tienen la altitud y el clima perfecto para la producción de cultivos comerciales.
El café encontró un buen sitio aquí para instalarse y, hasta hace poco, los aldeanos lo cultivaban y podían vivir de esta producción.

Hoy en día, apenas encontramos rastros de estas plantaciones, cruzando en camino algunos arboles, como reliquias de un pasado olvidado.
Este paisaje no es un caso aislado sino una representación de la realidad y las preocupaciones actuales para el futuro de la producción de café.
Entonces... ¿qué está pasando? ¿Por qué se abandona el cultivo de café?

La razón es simple y trágica al mismo tiempo. Los productores simplemente no pueden vivir de eso.
Si miramos las cifras de la bolsa de Nueva York, el precio actual del café arábica convencional (es decir, no certificado) es de aproximadamente 2.76 US $/ kg de café verde.
Esto es en algunos casos menos (¡mucho menos!) que el precio que pagamos por nuestra taza de café en la mayoría de los países consumidores.
Y considerando los costes de producción del café verde (ver la publicación que explica las diferentes fases de la producción de café), no es tan extraño que las personas prefieran otros cultivos menos exigentes como el maíz, la zanahoria, legumbres, etc.
Sin embargo, aún hay un pueblo irreductible, llamado Kwembago, que no lo ha dejado totalmente.
El Tupende Coffee Corner ofrece café de estos productores locales.

Intentan promover y valorar este saber-hacer artesán mediante la organización de recorridos en los que los turistas pueden visitar fincas, entender cómo se produce el café, tostar y luego comprarlo.
Todo esto para incentivar a la gente, para que sigue con la producción de café que tiene aquí las condiciones ideales para florecer.
